¿Te has sentido alguna vez abrumado por el estrés o la ansiedad?
Practica el STOP, una técnica corta que ha demostrado ser muy beneficiosa para mitigar los efectos negativos del estrés y la ansiedad.
Solo te llevará dos minutos. El objetivo es sacarte de ese círculo de inconsciencia y automatismo para conectar con el AHORA y con los beneficios del mindfulness.
Estos son los pasos del famoso acrónimo stop:
S Stop: detén lo que estés haciendo.
T Toma aire: respira lenta y profundamente un par de veces, siente la respiración entrando y saliendo de la nariz, alargando la exhalación…
O Observa: con amabilidad, tal y como son, las sensaciones, emociones y sensaciones físicas que percibes en tu cuerpo, ¿qué sientes? ¿en qué zona del cuerpo?
P Prosigue: continuacon lo que estabas haciendo, continúa llevando esa actitud amable y de consciencia.
Puedes utilizar algún elemento que te recuerde hacer una pausa y salir de la inercia cotidiana como, por ejemplo, una pulsera, una App en el teléfono móvil…
Esto lo puedes hacer en cualquier momento durante el día cuando lo recuerdes o cuando te sientas estresado o irritado. Te das cuenta de lo que sucede a tu alrededor o dentro de ti, te conectas con algunas respiraciones conscientes y luego procedes con desde un lugar con más claridad que te permite elegir en lugar de reaccionar.
Hacer una pausa a lo largo del día es un recurso muy valioso para desarrollar la atención plena e incrementar tu bienestar, además de reducir el estrés y mejorar tu productividad y creatividad.
Recuerda que hacer un STOP, cuando te sientes abrumado, te permite ganar claridad para seguir con tu día a día y tomar mejores decisiones. Haz una pausa cuando dudes, cuando te enojes o cuando sientas estrés. Practica la pausa.